El pabellón alemán es una obra de 1929, creada por el arquitecto Ludwig Mies van der Rohe con el propósito de ser exhibida en la Exposición Internacional de Barcelona. La obra es uno de los principales exponentes de la arquitectura moderna; contando con una simpleza característica, en donde se encuentra un juego continuo entre sus materiales y reflejos, lo cual hace que genere una sensación de libertad.
El espejo de agua genera una doble altura.
El juego entre reflejos no es solo al interior, sino que se propaga a todo el edificio.
"Los muros desaparecen", este es el efecto que se genera entre los reflejos y los materiales sólidos.
Las paredes continúan, no hay un fin entre los elementos de la composición.
No hay rupturas visuales, todos los elementos fluyen entre si.
Horizontalidad del edificio.
No se distingue si es la continuación de las pared o es un reflejo.
Less is More
